dibujo de Enrique Martín, de su blog, torosgradaseis. |
Como bien decía en mi
anterior entrada “cuando falta el protagonista principal (el toro) todo lo demás
no tiene importancia”
Últimamente y cada vez con mas frecuencia, crea menos
expectación ver anunciada una ganadería de cierto hierro y procedencia, que lo
que es el cartel en sí, dando más importancia a la terna, que a los ejemplares
que se vallan a lidiar esa tarde, pues si está anunciado el torero del gusto de
cada uno/a, todo lo demás no importa…
Sin ir mas lejos y poniendo un ejemplo palpable y real,
cuando salen a la luz los carteles de plazas de primera categoría,(feria de
Fallas, feria de Abril, San Isidro, Pamplona etc….) lo que hace el publico en
general, aficionados y prensa, es marcar o reseñar los carteles de máxima
expectación, donde suelen estar
anunciados los matadores del grupo especial, indiferentemente de la ganadería con
la que se anuncien, (aunque el aficionado en ciernes y amante del toro bravo,
no tiene que cavilar mucho para saber con que 4 hierros se van a anunciar
los matadores del grupo especial)
¿Qué está pasando? ¿tan pocos somos los aficionados que
quedamos qué sí deparamos la atención en la ganadería qué se va a lidiar? el
desconocer la ganadería, encaste y procedencia de los ejemplares que se ven
anunciados en el cartel, trae consecuencias y criticas con connotaciones
negativas a la hora de enjuiciar una tarde, indiferentemente de los matadores
que hayan compuesto la terna, pues no es lo mismo el comportamiento frio y
abanto en los primeros tercios de un toro del encaste Atanasio Fernández, procedente de la casta Vistahermosa, que el
comportamiento mas avispado y vivo de salida, que tiene un toro de encaste Santa
Coloma en línea Buendía, también procedente de la rama de Vistahermosa.
En resumidas cuentas, se está perdiendo el aliciente de
deparar la atención en las ganaderías que se anuncian en las grandes y medianas
ferias, donde hace no mucho tiempo atrás, se hacían corrillos de aficionados,
debatiendo sobre las mismas (10 años aproximadamente) Ahora, no hay mucho que debatir, pues las ganaderías
suelen ser siempre las mismas, de la misma procedencia, y de un comportamiento
similar, dando lugar a un espectáculo simple y clónico, donde el publico (no el
aficionado) va a la plaza a pasar una tarde de toros, como el que va un día al
Jarama a ver una carrera de motos, o el que va a un concierto con un grupo de
amigos por que son las fiestas del pueblo de al lado.
6 comentarios:
En efecto, tienes mucha razón.
De toda esta degeneración, es una de las responsables la 'prensa' que sólo hace girar toda la propaganda en torno de los toreros, postergando la importancia angular del toro.
La corrida es de TOROS, no de toreros.
Antiguamente se anunciaban las ganaderías que se lidiarían en letras grandes y en letras pequeñas los matadores.
Podrán decir lo que quieran, construir apoteósicos triunfos, pero eso sí, frente al medio toro.
Saludos,
POCHO PACCINI
Pocho Paccini Bustos;
Así es compañero, antes el aliciente de la ganaderia a lidiar, era santo y seña de la tarde, ahora es mero relleno en la gran mayoría de carteles excepto cuando se lidian ciertas ganaderías de interés del aficionado (no publico general)
Por otro lado, qué lastima que el publico en general, desconozca las procedencias, castas y encastes de la cabaña brava...
Un saludo
Ay compañero!! que estás metiendo el dedito en la llaga de lo que está ocurriendo (pa´no variar en tu persona Diego).
Yo creo que el mal de todo esto lo has mencionado claramente, y sabes que coincidimos plenamente en ello Diego: El público que asiste a una corrida de toros (que no el aficionado) es el que tiene la culpita de que veamos una y otra vez el monoencaste en los carteles. Porque realmente este tipo de gente van a ver a las figuras y les da igual que lo que salga por la puerta de chiqueros sea uno de Vistahermosa de la rama Buendia, como una cabra con dos pitones cogidos con celo. Ellos solo quieren a la figura de turno y el cubata sobre la barrera.
No hay nada que remedie esto Diego, porque estamos en minoria (aficionados y aspirantes a ello como yo).
Bueno te dejo que de esto podriamos estar horas y horas hablando (o escribiendo claro).
Un abrazo y enhorabuena por los articulos sobre el toro.
Marín;
Pero el toro no solo es él rey destrozado y sin corona para él publico (aficionado a parte) lo es para muchos empresarios, apoderados, figuras, novilleros etc, pero esos terrenos los tocaré en las próximas entradas.... y yo como siempre, escribiendo lo que veo y siento, eso sí, con la educación, el respeto y la elegancia con la que se tienen qué pisar estos terrenos.
Un abrazo
Diego:
¿Es que no vas a aprender nunca? Los artistas tienen unos derechos adquiridos para esquilmar la Fiesta como les dé la real gana y los demás, a callar. Así está esto. QUiero agradecerte y felicitarte por, aunque sea por alusión, volver a denunciar los desmanes de eso que llaman figuras,
Un abrazo
Enrique;
No aprendo no...o mejor dicho, no quiero aprender, aunque poco a poco la realidad va ganando terreno, y sin darnos cuenta (o dándonos cuenta los qué medio entendemos de esto) el sistema taurino que tenemos instaurado está convirtiendo esté espectáculo en "algo" rutinario, sin aliciente y descafeinado, porque como bien digo en infinidad de ocasiones "el toro es la materia prima y el eje vertebral de la tauromaquia"
Veremos qué pasa y que tipo de conceptos, tenemos dentro de 3 años, y fíjate, no me voy muy lejos, 3 años. 2.016
Un abrazo
Publicar un comentario