Esta cuarta novillada del ciclo nocturno de Madrid tampoco pasara a la historia.
Se lidiaron 4 novillos del Guadalest, 5º y 6º bis de la constancia, dado a que el 3º fue devuelto pero Mario corrió turno.
Ninguno de los novillos de juego desigual puso en apuros a los novilleros, fueron flojos pero manejables, destacando 2º y 3º que pudieron ser los más propicios para el triunfo, y un 6º que aunque soso dio opciones para estar mejor.
¿Qué paso con los novilleros?
Cristian Escribano, sobrado de técnica y más pareciendo un matador que un novillero, nos ofreció el toreo moderno, frio, entre líneas. En su primero no puso ni ganas ni ambición, solo técnica, en su segundo novillo, cuarto de la tarde-noche, lo recibió por verónicas a pies juntos, quizás lo más destacado de su actuación, porque a la hora de coger la muleta…. Más de lo mismo, toreo entre líneas, al hilo del pitón y todo tipo de vulgaridades propias de la anti tauromaquia, o mejor dicho, tauromaquia moderna.
Mi tocayo, el Mexicano Silveti, no supo ver las cualidades aunque no fuesen muchas de su primer novillo, quizás lo más destacado fue su valor, sobre todo a la hora de ejecutar las bernardinas, porque con los aceros no estuvo muy acertado que digamos, en su segundo bis, Diego tuvo la cabeza más despejada, mezclo varios conceptos y recursos, pero sobre todo supo aprovechar las querencias a tablas del novillo, donde le fraguo una faena mezclada de valor con espaldinas como recurso en tablas para que el novillo envistiese y así poder sacarle lo que tenía, para Diego, la espada es una asignatura pendiente, que si no la estudia un poco antes de la alternativa, suspenderá por mucho que haga bien los exámenes.
¿Y Mario? Si, más verde que una lechuga, se quedó descubierto delante de la cara del novillo en varias ocasiones, y peco de no estar muy toreado, y se le vieron muchos defectos del poco rodaje, pero es un novillero ¿no? Pues eso mismo, un novillero verde, pero con buen concepto, donde pude ver y leer entre líneas que su toreo es de echar pata pa lante, aun quedándose descubierto a merced del novillo. ¿Mario quiso agradar? Creo que sí, y los defectos se pulen, y el oficio se aprende a base de torear en las plazas, en el campo, pero el buen concepto o se tiene o no se tiene.
Una noche más con cosas por ver y otras tantas no querer ni verlas, pero los toros son así, y aquí 2 y 2 casi nunca son 4, donde nada está dicho, donde todo puede ser una caja de sorpresas, o un desastre por todo lo alto, esta es la magia de la tauromaquia, donde nadie sabe nada y aún las cosas están por ver….
6 comentarios:
Diego que con todo este jaleo de la Feria de Valencia, no me he podido apenas ni conectar.
En cuanto pueda oiré los programas y te agradezco mucho que te acordases de subirlo aquel día.
Eres un crack!
Estamos en contacto.
En cuanto a la entrada, pues que te voy a decir...
Idem!
Voy a leer todo lo que has puesto estos días.
Un abrazo desde Castellón, donde los TOROS solo se ven por las calles.
Iván;
Que menos que acordarme de un buen aficonado como tu, donde compartimos el mismo critero taurino.
Un abrazo muy fuerte!!
Diego no conocía su blog! un placer, voy a enlazarle y seguirle a partir de ahora!
Maestro:
Bienvenido con su buen criterio, aqui tiene su casa para dejar los comentarios que quiera.
Un saludo. Diego
MAL VAMOS CON LA TAUROMAQUIA MODERNA Y ESCONDIENDO LA PIERNA QUE CARGA LA SUERTE.
EL MULETAZO COJE MAS VUELO CUANDO SE CARGA LA SUERTE Y SE TOREA EN REDONDO.
LUIS DIAZ
Luis:
Nada mas que añadir.
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